viernes, 26 de noviembre de 2010

¿Sacamos tarjeta roja?...

PERRO MORDEDOR.

Se te fue la mano de largo,
pasaste de perro ladrador
a algo más amargo.

Se te fue la mano de largo
y ahora eres un perro mordedor
y como muerdes, me das asco.

Ya lo dijo Bebe, eres malo,
pero eres mucho más que eso,
eres un perro mordedor,
no has podido caer más bajo.

¿Cómo puedes hacer daño
a alguien a quien has amado?

¿Cómo puedes hacer daño
a quien te dio tanto?

Pero a ti te da lo mismo,
tienes varios problemas:
la prepotencia y el egoísmo,
la cobardía y  el machismo.

Espero que alguien más fuerte que tú
te dé a ti lo mismo
y te enseñe el abismo,
y ojala te pudras en el abismo.

Y si después de todo
te vas a quitar del medio,
hazlo antes, perro,
y evitarás mucho sufrimiento.

Se te fue la mano de largo,
pasaste de perro ladrador
a algo más amargo.

Se te fue la mano de largo
y ahora eres un perro mordedor
y como muerdes, me das asco.

¿Cómo puedes hacer daño
a alguien a quien has amado?

¿Cómo puedes hacer daño
a quien te dio tanto?

¿Y tu corazón?...

MI CORAZÓN ES MÁS FUERTE EN LAS GUERRAS.

A veces la vida es una prueba
y te ofrece cosas que no esperas.
Yo pienso que será por algo
y que hay que saber interpretarlo.

En cada decisión
hay que elegir
si hago caso a mi cabeza
o si obedezco al corazón.

Y así estoy siempre yo,
en medio de una guerra
entre mi cabeza y corazón.

Pero no puedo ponerle barreras,
mi corazón es más fuerte en las guerras.

Mi cabeza dice
que hago lo correcto,
mi corazón no asiente,
no está de acuerdo.

Mi cabeza dice
que será mejor así,
mi corazón no se rinde
y quiere seguir…

Según pasan los años
voy siendo menos reflexivo.
Quiero disfrutar más la vida,
¿sabes lo que te digo?.

Y si le hago caso al corazón
puede que tenga algún tropezón,
pero si se lo hago a mi cabeza
a veces la vida se frena.

Y así estoy siempre yo,
en medio de una guerra
entre mi cabeza y corazón.

Pero no puedo ponerle barreras,
mi corazón es más fuerte en las guerras.

Filosofía barata...

PREFIERO.

Hubo una vez
un sabio muy sabio,
muy listo muy listo,
que lo sabía todo
aunque nada había visto.

No sabía, sin embargo,
que él decidía lo que hacía,
y cómo iba por la vida:
si corriendo o andando.

Se dejaba llevar
por lo que los otros hacían,
y no sabía elegir
lo que él quería.

Caminando y caminando
se encontró conmigo,
y le terminé aconsejando
sobre la vida y el destino.

La vida es elegir
en el momento adecuado,
con un poco de suerte
y mucho trabajo.

Yo prefiero ser así,
a veces bueno,
a veces malo.
Mirando hacia adentro
mira lo que he encontrado:

Que prefiero el trabajo bien hecho,
que hacerlo mal y montar un lío.
Que prefiero amoldarme a mi destino,
que resignarme a las piedras del camino.

Que prefiero ver la vida en positivo,
que andar jodido.
Que prefiero ir caminando derecho,
que andar torcido.

Entonces el sabio
me terminó escuchando,
y del camino malo
se fue alejando.
Y entonces fue mucho más sabio,
y entonces fue mucho más listo,
por ver lo que yo ya había visto:

Que prefiero el trabajo bien hecho,
que hacerlo mal y montar un lío.
Que prefiero amoldarme a mi destino,
que resignarme a las piedras del camino.

Que prefiero ver la vida en positivo,
que andar jodido.
Que prefiero ir caminando derecho,
que andar torcido.

Hay quien necesita una segunda oportunidad...

UNA NUEVA BANDA SONORA.

Ya sé que no tienes gratos recuerdos,
que el respeto quedó lejos,
como el cariño y el afecto,
y que te has acostumbrado
a que te traten como un perro.

Ya sé que no hay
un punto fijo en tu camino,
que no tienes
un faro para tu destino,
ni nadie que te escuche
si estás hecho un lío.

Y tú, en lugar de ir por aquí
vas por allá,
necesitar faltar, mentir, desafiar,
para poder aparentar,
ser el gallo más fuerte del gallinero,
hacer tuyo lo que es ajeno,
hacerte el loco
en lugar de hacerte el cuerdo.

Y tú, los modales perdiste hace tiempo,
ahora sólo estás contento
si sacas lo que llevas dentro
contra los demás,
ahora sólo estás contento
tomando sustancias para olvidar.

Y sólo te divierte
la ley del más fuerte,
y sólo comprendes
la ley del más fuerte,
y el círculo da vueltas
cada vez más fuerte.

Sólo espero que de una vez
te quites la careta de hierro
y saques lo bueno que llevas dentro,
y que entre todos luchemos.

Y entre todos lo conseguiremos,
pero necesitamos tu esfuerzo,
que creas en ti, que luches por ti,
que no maltrates tu cuerpo.

Y con la mente limpia
te des la oportunidad
de tener otra vida,
y cambiar las sustancias prohibidas
por otras melodías.

Y me alegro de que intentes
comprender ahora
lo que dicen las canciones que molan,
y de intentar poner en tu vida
una nueva banda sonora.

viernes, 19 de noviembre de 2010

Cuidado con los ladrones...

LADRÓN DE IDEAS.

Yo sólo soy un ladrón de ideas,
si te dicen que soy brillante,
no te lo creas.

Yo robo lo que dicen
los mendigos y las estrellas,
soy un ave carroñera,
soy como una esponja,
me quedo con todo,
te observo, me fijo
y cojo lo que me interesa.

Y aunque a veces me cuesta
ir contra mi naturaleza,
voy aprendiendo de lo que me rodea,
siendo una esponja,
robando ideas,
observando de la vida
las cosas buenas,
aquellas lecciones
que merecen la pena.

Y ten cuidado
si estás de mí cerca
y no quieres que algo se sepa,
no lo cuentes
que siempre tengo puesta la antena,
que mi mente es hiperactiva
y siempre piensa, siempre te observa.

Y si prestas atención
te darás cuenta,
de todas las cosas
que la vida te enseña.

Sólo tienes que ser como yo,
un ladrón de ideas,
una esponja, una mente abierta,
esa es la mejor de las escuelas,
tomar de la vida
las cosas buenas,
aquellas lecciones
que merecen la pena.

Presos de amor...

CADA VEZ QUE TE VEO.

La historia cuenta que un preso,
preso de su amor y preso su cuerpo,
no podía amar a su amor
y se estaba muriendo.

En alguna ocasión,
si las estrellas estaban de acuerdo,
alguna comunicación
o algún bis a bis secreto,
en el que se producía el encuentro
y entonces le cantaba el preso,
y le contaba sus desvelos.

Cada vez que te veo
me caigo al suelo,
al ver tus ojos,
al ver tus labios,
al ver tu pelo.

Cada vez que te veo
me desvelo, y no duermo
si en ti pienso,
si contigo sueño.

Cada vez que te veo
subo al cielo
al ver tu boca,
al ver tu cara,
al ver tu cuerpo.

Y cada vez que te veo
afloran mis recuerdos
y agradecido me siento
de haber sido tu fuego,
de que hayas derretido mi hielo,
del amor que siento
y de haber sido tu aliciente secreto.

Y si no te veo
me caigo al suelo,
y ya no me elevo,
todo cambia y me revelo.
Me duele el alma,
me estalla el cerebro.

Y si no te veo
me siento abandonado como un perro,
como un millonario sin dinero,
como un prismático tuerto,
como una cerveza sin cuerpo,
como el segundo sin el tercero,
destrozado, inútil, desubicado, enfermo.

Y necesito verte para no caer muerto,
y necesito tocar tu cuerpo,
sentir tu boca, gozar tus besos
y sentir lo que contigo siento.

Porque cada vez que te no te veo
me siento del corazón preso
y bastante tengo
con que esté preso mi cuerpo.

Ya SÍ me miras...

YA NO ME MIRAS.

Ya no me miras
y se hacen grandes mis heridas.
Ya no me miras
y pierde el sentido mi vida.

Ya lo sabía
que podía ser un callejón sin salida.
Ya lo sabía
que podía acabar cualquier día.

Ya no me miras,
y no ha gustado la despedida,
y aunque ya no me miras,
no quiero que conmigo seas tan fría.

Y seguiré pensado en ti cada segundo
y seguiré pensando en ti,
y te seguiré amando,
y te recordaré
como lo más bonito de este mundo
y cada día 25 me seguiré acordando.

Porque es muy duro
bajar al infierno
después de haber tocado el cielo.
Porque es muy duro
no besar tus labios
ni tocar tu cuerpo.

Curiosamente el cielo sigue llorando,
¿será por algo?
Desgraciadamente, me estoy ahogando,
¿podré superarlo?
Porque ya no me miras
y se hacen más grandes mis heridas.
Ya no me miras
y pierde el sentido mi vida.

Y estoy harto de los golpes de la vida,
te necesito, te quiero y te amo todavía,
y sin ti la vida se pone cuesta arriba.

Ya lo sé,
a lo mejor es mejor una despedida,
y a lo peor, es peor que esto siga,
pero que quieres que te diga,
es más duro de lo que creía.

Y aunque la frase no es mía,
siento que ha sido
una historia de amos interrumpida,
y no sé lo que para ti he sido,
y tú para mí has sido el motor de mi alegría,
una historia de amor interrumpida,
porque ya no me miras.

Tú decides...

LO QUE EL CUERPO TE PIDA.

Lo que el cuerpo te pida
debe ser lo que elijas,
en cualquiera de los casos,
hay una salida.

Depende de cómo veas la vida,
depende de cómo quieras contarlo,
depende de lo que busques
y de cómo interpretarlo.

Elige lo que quieras,
lo que te interese,
eres tú, de cántaro alma,
quien acierta o quien la caga,
los demás echarán pestes
hagas lo que hagas.

Si no crees lo que te digo
mira lo que he encontrado,
puedes elegir entre uno
de estos refranes contrarios.

Si has perdido dos veces,
y debes decidir qué hacer,
con estos dos que vienen
te puedes perder, si no lo piensas bien.
Si te dicen que “a la tercera va la vencida”,
no puedes perder otra vez seguida.
Pero si “no hay dos sin tres”,
perderás otra vez.

Y para comenzar el día,
dos contradicciones seguidas
te crearán la duda
si te dicen que “a quien madruga Dios le ayuda “
y por otro lado, te quedas pensando
si te dicen que “no por mucho madrugar
amanece más temprano”.
¿A cuál entonces hago caso?

Por eso te decía
que elijas lo que el cuerpo te pida,
que en cualquiera de los casos
encontrarás una salida.

Depende de cómo veas la vida,
depende de cómo quieras contarlo,
depende de lo que busques
y de cómo interpretarlo.

Elige lo que quieras,
lo que te interese,
eres tú, de cántaro alma,
quien acierta o quien la caga,
los demás echarán pestes
hagas lo que hagas.