EN MIS FOTOS.
Con una semana de diferencia
aparecimos en escena,
horas de la niñez, de la infancia buena.
Antes del verano, después de la primavera.
Los recuerdos de una niñez en paralelo
quedaron frenados un maldito verano,
recuerdos duraderos, duele recordarlo.
Recuerdos paralelos, un día truncados.
Qué putada amigo
no poder haber podido
seguir creciendo contigo
y más momentos haber compartido
en nuestro paralelo camino.
Uña y carne, inseparables,
recuerdos imborrables,
compartiéndolo todo
como niños ejemplares,
en mis fotos siempre sales.
Una referencia a mi lado tus padres,
mejor tratado que un rey si cabe,
suerte de haberlos tenido
tantas veces a mi lado,
en mis fotos siempre sales.
Siempre estaban las puertas abiertas,
aunque las cosas ya no eran
como eran antes,
para lo que quisieras.
Qué putada amigo
no poder haber podido
seguir creciendo contigo
y más momentos haber compartido
en nuestro paralelo camino.
Y llegó un momento,
una mirada, un gesto,
una frase que instaló el silencio,
me golpeó por dentro,
cambiando lo que pienso,
para aprovechar el tiempo,
y aprender a reír cuando lo veo negro,
sacando lo que llevo dentro.
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